«Hay sitios donde siempre hay una excusa para los negros», lamenta Andy. Este nigeriano, vecino de Torrejón de Ardoz desde hace nueve años, casado con una española y con un hijo, asegura que en algunos bares del municipio no se permite la entrada de inmigrantes por sistema. EL PAÍS fue este fin de semana con él y con otros extranjeros a comprobar si existe esta prohibición en Torrejón, donde 26.000 de los 116.000 habitantes son extranjeros, un 22%. La siguiente escena es una muestra del trato que reciben. Lee el resto de esta entrada »